La ciencia del sueño

¿Te has puesto los mismos pantalones 200 veces?

¿Para enamorar a alguien le has construido una ciudad?

¿Te resulta difícil esquiar, cuanto ves que todos lo hacen como profesionales?

Ser un gato baterísta, hacer que un caballo trote por medio de un motor que trabaja con principios basados en el azar, y un mexicano que va a Francia sin hablar mucho el francés y ser el anfitrión de tu propio programa de televisión es el papel que ahora interpreta Gael García Bernal en “La science des rêves”, un film de Michel Gondry, el apasionado por el tiempo que nos hizo perder la memoria en “Eterno resplandor de una mente sin recuerdos”. Ahora, con la ayuda de la animación cuadro por cuadro (nada de palabras en ingles por favor) logra crear el mundo de Stephane interpretado por el Gael (muy mexicanote, pero pinche nombre francés), el tipo que no tiene aduana entre la realidad y el sueño.

Una película muy fácil de adaptar, todos queremos ser como Stephane, o si no resulta, todas quieren ser como la co-protagonista Charlotte Gainsbourg (la hija del cantante Serge) llamada Stephanie -hilarante jo jo jo- llena de sueños pero cabrona para no perder. O incluso si nadie quiere salir del juego, esta Guy, el compañero de trabajo de Stephane, que le aconseja “¡cogetela! “

Sencilla de pensar, difícil para realizar y muy compleja para hacer su secuencia escrita (mucho papel ñ_ñ)

Recuerdo una frase que le dice Charlotte a Gael:

-¿siempre tienes que ser tan cerdo?

Haciendo referencia a que sin dientes las mujeres son mejores en el sexo oral.

Vale la pena tenerla, pero creo que es mejor la versión en región 1, la cuatro tiene la portada hecha por un tipo que acababa de aprender a usar photoshop, pero también es cierto que tiene 30 cortrometrajes, todos hechos cuadro a cuadro.

También esta muy padre la música.

”Je me suis levé bien tard, ce matin

Trop tard pour le petit déjeuner “

El pensamiento mesoamericano en el debate filosófico

Por fin, salio el libro del año, El pensamiento mesoamericano en el debate filosófico. ¿De quien? De Luis Miguel Gallardo Salazar. La tesis que escribió para su maestría e filosofía. Ademas de su maestría en ingeniería química.

¿Tenemos una identidad nacional?, es decir, ¿en verdad le damos ese valor al origen que tenemos? ¿O nos estamos creyendo, descendientes de argentinos, italianos, españoles o kuala-lumpurenses? ¿Desde la conquista, somos otros?

Bueno lo mejor seria usar la filosofía para encontrar un respuesta a tan antigua pregunta.

No es un libro que cualquier bailarín de tap pueda leer, pero si se le puede entender. Y si alguien lo quiere me avisa, no son muchos ejemplares, y la editorial es la de la Universidad veracruzana, así que encontrarlo sería un poco complicado.

Luis Miguel Gallardo Salazar (Perote, Ver., 1951-2006). Ingeniero Químico, filosofo, catedrático y editor de la UV. Entre sus publicaciones están: “A la búsqueda del edén perdido”, “Pintando el mundo de sabores”,”Los andares del triunfo”; el monólogo para teatro “La casa de Madame Revolufia” y los guiones para radio Las insurgentes, Casi el paraiso y Las jarochas del 14.

El quinto día

¿Saben que tienen en común, un humilde pescador artesanal del Perú perdido con un cambio de comportamiento en la ballenas que llegan a Canadá y la aparición de unos organismos medio raros en Noruega?

Yo tampoco, pero me parece muy interesante el saberlo.

Se trata de un libro, muy grande, que habla al parecer (puesto que no lo he acabado) del fin o el posible fin de la raza humana*. Ademas de explicar todos y cada uno de los términos, casi obvio pues sin esto la historia tendría sentido solo para los especialistas, la historia llega a un punto de casi fantasía al descubrir tantas cosas que no teníamos la mas mínima idea de su ser.

Taludes continentales, gusanos de hielo con enormes dientes, y nubes de animales son temas de cuidado, especialmente por que son totalmente reales, bueno los taludes si se tiene mas idea, pero los demás si asustan. Pensar que todo es hasta cierto punto verdad es preocupante. Gastemos el agua y el gas, cortemos la florecita para regalarla, tiremos el aceite de cocina en el lavabo. De igual y tenemos un amigo gusano de 17cm de color rosa brillante y con dientesitos.

Y lo que falta. Espero que sea tan bueno como para hacer valer cada una de las 970 paginas y me haga dejar de pensar un rato en el “me espero para que no acabe nunca”.

Ademas como dato curioso, su autor Frank Schätzing (alemán por cierto) ¡no es escritor por vocación!

Empezó como director creativo de una empresa, también es músico compositor, ademas de ser apasionado cocinero. Hasta la década de los años 90 decidió escribir y vaya que pegó duro. No dudamos que dentro de poco sea también guionista y director de sus propias películas.

Si de verdad esta horrible les digo antes de que lo compren, creo que no es nada barato. Pero espero que lo compren antes de que sea tan famoso y saquen la película y dejen el libro a un lado.

*ni batman ni superman han sido mencionados hasta ahora.

oscargallardo.blogspot.com V.2.0.0.3

Os presento la nueva versión del blog.

Tenía pensado poner botones en flash, pero eso toma mas tiempo y quiero tenerlos de caché así que esos estarán hasta después.

Por supuesto en este blog todo es:

Eine bratwurst mit ketchup bitte!

Per ce mi dici que non sono il ragazzo per te!

Moi, je voudrais bien, qu'il est un fleur dans mon jardin!

Why don't you pump in my lamborghini gallardo?

Eu quero un bacio de vocé!

Jaha bibi!!

y más...

Dialogo interior!!!

Por fa, chequen a la artista del momento... (y no estoy hablando de Carmen Salinas!)

Adry del Rocio... (adracio pa' los compas, pero ustedes no le llamen asi ok?)

se sorprenderan en verdad!!!


adrydelrocio.blogspot.com

Google earth 3D

algunas veces no tengo nada que hacer, pero otras veces no...


Pero no existe la misma definición en Xalapa, tendré que esperar...

y yo creí que Francia no me había enseñado nada. :D

El Coyote y el conejo

Esta historia la leí siendo un niño de mas o menos 8 años, encontré esta publicación en la feria del libro infantil y juvenil de Xalapa.

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Una vez el coyote se encontró a un conejito y le dijo:

-¡Ay qué conejito tan sabroso; ahorita mismo me lo voy a comer!

El conejo, aunque tenía mucho miedo, pudo decir:

-Mira, amigo coyote, no me comas y te voy a dar unos zapotes muy maduros. Los zapotes son mejores que yo.

El coyote se dejo convencer, y mientras se comía los zapotes, el conejillo se peló, se fue corriendo, dando grandes saltos. El coyote alcanzó a verlo y le siguió los pasos. Corrió y corrió hacia el carrizal hasta que lo alcanzó. Entonces le dijo:

-Ahorita sí te voy a comer porque me engañaste a lo vil.

-Mira- le contestó el conejito- no me comas y te voy a llevar a una pachanga, a una boda. Vas a ver qué bonita se va a poner la fiesta. Habrá música, mucha comida y mucho que tomar. Tú vas a tocar la guitarra y yo también.

Y sin que el coyote lo viera, ni darle tiempo a decir nada de nada, el conejito le prendió lumbre al carrizal. Luego le dijo al coyote:

-Cuando oigas que están tronando los cohetes, con más ganas le das a la guitarra. ¡Vamos a divertirnos un rato!

Tronaban los carrizos y el coyote tocaba y tocaba la guitarra creyendo que eran los cohetes los que tronaban, cuando en realidad era el carrizal el que se estaba quemando.

Ya venía la lumbre cerca del coyote, ya mero lo iba a quemar cuando el conejito dio un brinco y se escapó. Con mucho trabajo el coyote pudo salvarse de la lumbre y siguió tras los pasos del conejo. Y allá, no muy lejos, vio una peña desde la que se veía, en medio del cielo, a la luna, redondita como un queso. El coyote encontró al conejo y le dijo:

-¡Ah, conejito, cómo me engañaste! Me querías quemar, ¿verdad? Pero vas a ver, ahora si te voy a comer.

-Mira- le contesto el conejito- no me comas; mejor vamos a comernos un queso que tengo guardado.

-Ve a traerlo.

-Mira, párate aquí para que lo veas.

Se aró en la peña el coyote. Se asomó y ya vio el queso allá abajo, nadando en una fosa de agua. Entonces el coyote se aventó de cabeza a la fosa, se zambulló y no volvió a salir. El conejito se fue muy tranquilo y aquí se acabó el cuento del coyote y el conejo.